Platón a través de esta metáfora
intento describir como se posiciona el ser humano respecto a los
conocimientos desde un punto de vista filosófico.
Repasando lo que él expresó, en esta
metáfora estaríamos hablando de un mundo sensible, al que
llegamos a través de los sentidos, percepciones, y el mundo
inteligible, al cual solo podemos llegar mediante la razón.
En las representaciones gráficas, que
todos hemos visto alguna vez, podemos observar como los
protagonistas, los hombres, se encuentran ubicados en tres niveles
distintos.
Por un lado encontramos aquellos
humanos que solo pueden ver las sombras de los objetos y por lo tanto
creen que esa es la única realidad, si esto lo trasladamos al
terreno psíquico, diremos que estas sombras constituyen el registro
de lo imaginario.
Vamos a poner un ejemplo de la vida
diaria que representaría lo imaginario: cuando interactuamos
con la gente por lo general nunca nos mostramos tal como somos, unas
veces adoptamos el rol de ser personas abiertas, otras veces nos
retraemos en nuestro comportamiento, mostramos nuestro “yo”
dependiendo de como nosotros percibamos el ambiente donde estemos, y
ya de pasada los otros nos percibirán dependiendo de “la mascara”
que hayamos adoptado. Pero debéis tener en cuenta que muchas veces
adoptamos la actitud contrapuesta a lo que realmente somos, si somos
retraídos a fin de esconder nuestra manera de ser nos mostramos como
todo lo contrario, así somos y actuamos desde nuestras neurosis.
Segundo nivel, cuando son desatados de sus
cadenas, ven que las imágenes eran reflejos de la hoguera y descubren
que hay otra realidad diferente a las sombras que hasta este momento
habían visto, esta nueva realidad si la llevamos otra vez al terreno
de lo psíquico se corresponde a lo simbólico.
Donde situamos lo simbólico?, pues son aquellos constructos, palabras, conceptos que no se pueden medir
y que nos vienen dados por la sociedad, la enseñanza, la política,
tales como solidaridad, honestidad y una larga lista, que para cada
uno de nosotros tiene un significado particular e intransferible.
Muchas veces inconscientemente nos enarbolamos en la bandera del
honor o de la solidaridad, para enmascarar otras cosas y nos
auto-engañamos a nosotros mismos, esto tan solo se puede observar en
el espacio terapéutico, pues en él y si el paciente es totalmente
honesto consigo mismo desplegará toda una serie de discursos, que si
esta atento a lo que dice, se dará cuenta
de que solo era eso, un enmascaramiento a otras razones a las cuales
no estaba dispuesto a aceptar
Pero vamos un poco mas allá, si
observamos hay otros hombres que están fuera de la caverna, ellos
son los que pueden observar y ver que hay otro mundo mucho mas amplio
y que el paisaje que hay fuera es inabarcable, se extiende mucho mas
allá de lo que sus ojos pueden ver, a nivel psíquico lo llamaremos
lo real.
Para finalizar pongamos un ejemplo de
lo que es lo real, a nivel psíquico, es lo imposible, aquello
que no se puede nombrar fuera del lenguaje, simbolizar, imaginar, no
obstante siempre está presente. Un ejemplo para entenderlo es: son
reales la vida y la muerte, cuando nacemos, como seres humanos
pertenecemos a lo real, un bebé no tiene un Yo definido, lo tendrá
cuando se reconoce a partir de la figura materna y mas tarde con la
adquisición del lenguaje, a partir de aquí el bebe cuando se
reconoce primero, para mas tarde diferenciarse de la madre es cuando
entrará en el imaginario adquiriendo de esta manera el estatus de
sujeto y a partir del cual irá moldeado su Yo.
Hasta aquí he intentado trasladar a
nivel psíquico esta metáfora del filosofo Platón, y que tiene que ver también con lo inconsciente, espero que os
haya gustado este tema que reconozco es un tanto difícil de
entender.
Gracias por leerme y compartir.
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