Ir al contenido principal

Porque mentimos

Nos encanta la mentira     






La mentira le encanta al niño que no quiere escuchar su realidad, es el antidepresivo del soñador, la droga del político, la carnada del Casanova, el escape del fracasado, la esperanza del creyente, la amnesia del pueblo, la risa del poderoso.

De la mentira se vive. La verdad nos tortura. Y no porque seamos indignos y cobardes. La verdad nos mata porque es insoportable. Es un veneno que nos quita el velo, trago a trago. Nos deja a afuera, nos confronta, nos obliga a destruir una parte nuestra...

¿Quieres triunfar en la ciudad de la sonrisa, en el averno de lo superficial y de las mentes codiciosas? ¡Miente!, a todos, a cada gente que diga “hola", a esos espejos de la calle que dictan verdad.

¿Vas a caminar en el fango, en el pesimismo, en la hiriente honestidad y en la claridad de la furia? ¡Finge!

Si quieres ser amado, deberás mentir.

Ser alguien más, ser alguien impropio, lisonjero, repetidor de frases similares como: “eres diferente a las demás", “eres única", “eres hermosa". ¡Carajo!, a veces me cuestiono si no se aburren las mujeres de escuchar lo mismo... Bueno, lo que importa es el mensajero y no el mensaje en estos casos. Sin embargo, todos tienen el mismo fin; conseguir y permanecer con esa persona que se quiere.

La verdad no es para cualquiera. Es para idealistas, para personas que aún creen en su prójimo. Es para aquellos que no temen herir a nadie, es para valientes que no tienen misericordia con los idiotas.

La verdad, es tan linda y cruel en un mismo tiempo. En este apogeo que vivimos donde las falsedades nos venden estilos de vida, productos, servicios, creencias, moldean mentes y destinos, quien porta la palabra sin mácula, se convierte en un desterrado, en un apátrida, en un ser libre y por tanto, solitario. La verdad sólo puede ser usada a solas, o con otros desterrados...

Pero nos encanta mentir. Nos encanta tanto que ya lo hacemos sin darnos cuenta.


Jonathan Haller

Comentarios

Posts Populares

Paradojas de la vida cotidiana

Una paradoja es una verdad que parece una mentira. Jorge Luis Borges El término paradoja significa: “directamente contrario a la opinión que sobre un tema se tiene” o “conocimiento que se opone al sentido común”. (Castellá 2001:9). Al encontrarnos frente a una paradoja, ésta nos confunde de inicio, ya que viene a romper con la idea generalizada que tenemos acerca de ese tema; de entrada nos choca y desafía nuestra razón, y quizás la primera sensación que experimentamos sea de rechazo e incredulidad. Sin embargo, a la vez nos seduce, nos llena de asombro, nos deja perplejos, nos deslumbra y se mantiene presente revoloteando en nuestra cabeza, hasta el momento en que finalmente admitimos la gran verdad que la paradoja encierra. Budistas , chamanes y grandes sabios han utilizado las paradojas a través de los siglos para transmitir mensajes, enseñanzas y para que sirvan de guía a las personas hacia la solución de algún conflicto o dilema. Una de las grandes

Creencias Irracionales Adquiridas

Os habéis parado a pensar la cantidad de ideas que se nos han inculcado desde nuestra infancia y que van aumentado con nuestra incorporación en la sociedad?, lo que llamamos socialización. La gran mayoría de estas creencias nos llevan muchas veces a crear divergencias entre lo que nosotros realmente queremos y lo que estamos “obligados” a hacer por educación. El carácter dogmático y poco realista de estas creencias se manifiestan a través de perturbaciones emocionales como: ira, miedo, culpa, las cuales nos impiden vivir una existencia feliz independientemente de los avatares que forman parte de la vida. Esta viñeta de carlitos representa perfectamente el tema del post. Veamos algunas creencias irracionales mas frecuentes: Necesidad extrema de ser amado y aprobado por las personas significativas de nuestro alrededor, familia, comunidad. La idea de que para ser valioso debemos ser competentes, suficientes y capaces de lograr cualquier objetivo. L

Alegoría de la Cueva de Platón

Platón a través de esta metáfora intento describir como se posiciona el ser humano respecto a los conocimientos desde un punto de vista filosófico. Repasando lo que él expresó, en esta metáfora estaríamos hablando de un mundo sensible, al que llegamos a través de los sentidos, percepciones, y el mundo inteligible , al cual solo podemos llegar mediante la razón. En las representaciones gráficas, que todos hemos visto alguna vez, podemos observar como los protagonistas, los hombres, se encuentran ubicados en tres niveles distintos.